Ya se encuentra en marcha el protocolo de la NBA para detectar y prevenir la expansión de la COVID-19. En la primera ronda de pruebas se detectaron 16 casos positivos de un total de 302 pruebas realizadas a los jugadores, un 5,3% de los que deberían participar en el retorno a la competición a finales de este mes.
En los New Orleans Pelicans, ya se han confirmado que tres de sus jugadores se encuentran entre los positivos. El GM David Griffin ha aducido motivos de privacidad, legalidad y seguridad para no concretar que atletas se han visto afectados.
“La liga tiene un sistema diseñado para cazar estos casos. El sistema ha funcionado, y vamos a lidiar con ello de la mejor manera posible”.
David Griffin, directivo.
“Desde un punto de vista de juego, creo que vamos a ver como la COVID-19 tiene un enorme impacto en los equipos, incluso algunos de los que llegarán en posiciones de playoffs. Lo hemos visto con Brooklyn, que se han visto muy dañados por la situación. De nuevo, creo que todos estamos a merced del mismo enemigo”.
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